lunes, 28 de febrero de 2011

Carros de Fuego

Comenzamos la semana con un artículo un tanto especial, y es que esta noche se han entregado los premios más importantes del cine, los Oscar, es por ello, que hoy nos salimos un poco del guión y hablaremos de una película que trata sobre el mundo del deporte, una historia basada en un hecho real que consiguió 4 estatuillas de la academia, entre ellas, la de mejor película.


Es una película de 1981 y como hemos dicho se trata de una historia real, pongámonos en situación: Gran Bretaña, año 1920. Dos jóvenes corredores de diferentes clases sociales (Eric Liddell y Harold Abrahams) se entrenan con un mismo objetivo: competir en los Juegos Olímpicos de París 1924; sus personalidades son muy diferentes:

Eric es un cristiano evangélico de la iglesia reformada de Escocia y sus padres son misioneros en China, él ha nacido en China pero ha vuelto a Escocia para estudiar. Desde muy joven demostró grandes aptitudes para el deporte, sobre todo en el rugby y en las pruebas atléticas de velocidad. En 1920 se matriculó en la Universidad de Edimburgo para estudiar ciencias exactas. En su etapa universitaria continuó entrenando y compitiendo en rugby y atletismo.
En 1923 se proclamó campeón británico de 100 y 200 yardas. En las 100 yardas estableció un nuevo récord nacional con 9,7 segundos, que no sería batido hasta 35 años más tarde.



Su fama como deportista excepcional más su simpática personalidad y su desenvolvimiento como un predicador del evangelio en contacto con la gente hacen de Eric un personaje de excepcional talla: famoso pero humilde, conocido por todos pero también accesible a todos.

Harold Abrahams, es un personaje conmovedor pero en claro contraste con Eric, en su condición de judío hijo de inmigrantes percibe dolorosamente que no cuenta con el beneplácito de los ingleses. Harold posee una personalidad marcada por un complejo de inferioridad social, cuando entra en el Caius College de la Universidad de Cambridge, bate el récord de velocidad tradicional de la Universidad y encuentra una solución a su necesidad de aprecio al convertirse en un famoso corredor.
 
El momento álgido de la película llega cuando ambos corredores pasan a formar parte del equipo olímpico de Gran Bretaña que participará en las Olimpiadas de París en 1924. El resultado será que Erik Lidell alcanza la medalla de oro en los 400 metros lisos (marcando un nuevo récord olímpico) y la de bronce en los 200 metros; su gran especialidad eran los 100 metros, pero esta prueba se llevó a cabo en Domingo, por lo que Lidell, siguiendo sus creencias religiosas renunció a participar en dicha prueba. Por su parte, Harold Abrahams consigue la medalla de oro en los 100 metros lisos y la de plata en los relevos 4 x 100 metros, regresa a su país con el deber cumplido y satisfecho, lo hace también con el aprecio de toda Gran Bretaña.

Tras los Juegos de París:

Eric Lidell obtuvo ese mismo año su licenciatura universitaria. Continuó compitiendo durante un tiempo, aunque en 1925 decidió marcharse a China como misionero tal y como habían hecho sus padres. Liddell sirvió como misionero el resto de su vida.Durante este tiempo también compitió esporádicamente en algunas carreras, como en 1930, cuando ganó en los campeonatos del norte de China. Se casó en Tianjin con y tuvo tres hijas. A partir de 1941 la vida en China se volvió peligrosa debido a la guerra con Japón, y la embajada británica le aconsejó que regresara a Europa. Liddell decidió quedarse, pero envió a su mujer y sus hijas a Canadá, mientras él aceptaba un nuevo destino en una misión rural.
En marzo de 1943, cuando llegaron los invasores japoneses, fue internado en el campo de prisioneros de Weixian, donde falleció en 1945 debido a un tumor cerebral.

Harold Abrahams pocos meses después de la competición de París, se ve obligado a retirarse de forma prematura debido a una lesión en el pie. Concluyó sus estudios de derecho en Cambridge, aunque posteriormente ejercería de periodista deportivo durante la mayor parte de su vida, siendo comentarista deportivo de la BBC radio. También llegó a ser presidente de la Federación Británica de Atletismo. Finalmente se convirtió al catolicismo en 1934.
Abrahams falleció en Enfield en 1978 a los 78 años.

Para finalizar, deciros que os recomiendo esta gran película, que obtuvo los Oscar a: mejor película, mejor guión original, mejor diseño de vestuario y tal vez os suene la canción por la que obtuvo el Oscar a mejor banda sonora, teneis el link abajo, pertenece a Vangelis.


Como siempre digo, espero os haya gustado y se agradecen (y mucho) los comentarios, un saludo a todos.

1 comentario:

  1. Bonita historia y mítica canción. Es muy educativo que se hagan películas sobre deporte y deportistas gracias.

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