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Hristo Stoichkov nació en Plovdiv (Bulgaria) en 1966, su nombre en búlgaro se escribe "Христо Стоичков", jugaba como extremo y posteriormente hizo sus pinitos como entrenador y seleccionador.
En 1985 comienza su carrera como jugador profesional en el CSKA Sofía de la capital búlgara, donde comenzó a mostrar su gran calidad técnica y su velocidad, colaboró con el resto del plantel para alcanzar en esos años un palmarés envidiable: 3 ligas y 4 copas de Bulgaria. Allí compartió vestuario con otro grande del fútbol búlgaro, Luboslav Penev. También pasaría por allí, aunque años más tarde Ilian Kiriakov.
En sus últimos años en el fútbol búlgaro era sobradamente conocida su gran capacidad goleadora y su desparpajo, por lo que en el verano de 1990, tras 6 años en Sofía y más de 100 goles con su club el FC Barcelona se hace con sus servicios. El montante del fichaje fue de 400 millones de pesetas.
No hace falta que comente mucho cómo le fue a Hristo en la ciudad condal, sólo hay que decir que formó parte del Dream Team que formó Johan Cruyff y que tomó parte activa en las 4 ligas consecutivas que consiguió el equipo blaugrana, a las que hay que añadir la Copa de Europa de 1992, 4 Supercopas españolas, 2 Copa del Rey primero con Bobby Robson en el banquillo y posteriormente con Van Gaal, también 2 Supercopas de Europa, en 1992 y 1998 además de la Recopa de Europa conseguida con el equipo de Robson en 1997. Un palmarés realmente impresionante al alcance de muy pocos.
En el FC Barcelona coincidió con otros grandes del momento como Zubizarreta, Ferrer, Koeman, Nadal, Guardiola, Bakero, Laudrup o Romario.
Durante esta época Hristo se convirtió en un auténtico ídolo para los aficionados del Barça, su entrega era siempre total, tanto que en más de una ocasión le jugó alguna mala pasada, en una ocasión... ¡le dio un pisotón a un árbitro! Corría la temporada 90-91 (la de su fichaje) y la Federación le impuso una sanción ejemplarizante, 6 meses sin jugar.
Con los años su aportación al equipo va descendiendo poco a poco y algún que otro "mal rollo" debido a su carácter hacen que Stoichkov fiche por el AC Parma italiano, no tardó mucho en darse cuenta de que no quería estar lejos de Barcelona, porque al club tan sólo 1 año más tarde.
Fueron 2 años donde Hristo siguió engrosando su palmarés, pero a nivel individual su juego no era el de años atrás, por lo que en 1998, con 32 años vuelve al club que lo vio explotar como futbolista, el CSKA de Sofía.
Tras salir de Barcelona por 2ª vez una vez más demuestra ser un "culo inquieto" sólo 4 partidos en la liga de Bulgaria para marcharse a Arabia Saudí, juega 2 partidos con el Al Nassr y emprende viaje a la Liga de Japón, en el país nipón disputa 2 temporadas en el Kashiwa Reysol a buen nivel.
Stoichkov tiene ya 34 años, pero sigue con ganas de fútbol, en el año 2000 se va a la liga de los EEUU (la MLS) para jugar 3 años en los Chicago Fire y 1 en el DC United donde decide retirarse en 2004 con 38 años.
Ha sido galardonado con la Bota de Oro, junto al mexicano Hugo Sánchez en 1990. En 1994 le fue otorgado el Balón de Oro.
Con la selección de su país alcanzó las semifinales de la Copa Mundial de Fútbol de 1994. En ese torneo Bulgaria estuvo a un nivel altísimo, en gran parte gracias a Hristo, que marcó 5 goles en el campeonato.
En su carrera con la selección búlgara Hristo Stoichkov disputó un total de 83 partidos anotando 37 goles.
A lo largo de su carrera fue expulsado en numerosas ocasiones, y es que era capaz de discutirle al árbitro todas y cada una de las decisiones que tomaba en el partido.
Del Real Madrid ha dicho que "me da asco" y de Mourinho que "no es tan mal tío". Se le atribuye también la siguiente cita: "¿Me arrepiento de algo? De muchas cosas, pero jamás bajaré mi guardia, siempre hay un hijo de puta que te quiere pasar por encima, en especial los envidiosos."
En 2004 asumió el cargo de seleccionador nacional de su país, le fue realmente mal y además algunos jugadores abandonaron la selección por diferencias con Hristo.
En el mes de abril de 2007 ficha por el Real Club Celta de Vigo en la fase final de la temporada con el objetivo de lograr la permanencia en Primera, en su primer partido consiguió imponerse a su eterno rival, el Deportivo de la Coruña, por 1-0. El resto de resultados son pésimos y el equipo acaba en Segunda División.
En 2009 se anunció que había llegado a un acuerdo con el Aboomoslem de Irán para dirigir al equipo, finalmente el entrenador búlgaro se echó atrás por la delicada situación política del país.
Stoichkov firmó domo entrenador del Mamelodi Sundowns de Sudáfrica en Junio 2009.El 17 de marzo de 2010 presenta la dimisión a dicho equipo.
Actualmente dirige un Campus de fútbol y escuela de Fútbol en el Colegio Salesianos de Mataró.
Ha jugado varios partidos de veteranos con objetivos solidarios.
El mes pasado fue nombrado por el gobierno búlgaro como cónsul honorario en Barcelona.
Esta es la historia de un grandísimo jugador y un pésimo entrenador, un hombre con un temperamento brutal, que no dejaba a nadie indiferente, estabas con él o contra él, un hombre enamorado de un club, que lo dio todo en el campo por un escudo y que ahora más como aficionado que otra cosa, sigue profesando ese amor allá por donde va.
Preguntas: ¿qué pasaría hoy en día si un jugador de Primera le diese un pisotón a un árbitro? Yo ni siquiera me lo imagino, supongo que serían otros tiempos, ahora me parece muy difícil que ocurra algo así. Stoichkov ha sido siempre un hombre polémico ¿cómo os cae? a lo que habría que añadir ¿eres del Barça? jeje.
Como siempre digo, espero os haya gustado y se agradecen (y mucho) los comentarios, si conocéis algún detalle más sobre la temática del artículo podéis comentarlo, os animo a participar en La Mazeta Deportiva y os recuerdo que podéis seguirla también a través de Facebook, un saludo a todos.
Un crack Hristo, y lo bien que se lo habría pasado si estuviera ayer sobre el césped xD
ResponderEliminarEso sí, como entrenador debería pensar en la retirada, porque va de fracaso en fracaso
Un grande Hristo. Es difícil encontrar grandes profesionales tanto como jugador y como técnico, este es un caso.
ResponderEliminarÉxitos, te espero en mi blog.
Pocos como él, se llegó a rumorear que si el Compos no hubiese descendido a segunda, Stoichkov hubiese jugado ahí junto con Penev ¿Que tendría eso de cierto?. Su carácter nunca me gustó, excesivamente antipático y prepotente.
ResponderEliminarNunca había escuchado ese rumor, si ya ver a Penen en el Compos me pareció increíble... ver a Stoichkov... él solito habría conseguido 2.ooo o 3.000 socios más.
ResponderEliminarA mi tampoco me gusta mucho su carácter, pero es de ese tipo de personas que encantan a los periodistas, no paran de dar titulares.
Pena que un altisimo nivel futbolistico tuviera como contraprestacion un bajisimo coeficiente intelectual... y pena que el club le consintiera todo.
ResponderEliminarMi imagen mitica de la seleccion bulgara fue un grupo de visigodos en el mundial de USA 94, todo el dia discutiendo entre ellos, pero jugaron algunos de los mejores partidos de ese mundial.
De Stoichkov hay una anecdota de cuando llego a Barcelona. Lo metieron en un chalet de la Costa Brava pero no le dieron dinero y tuvo que ser un periodista de aquella region el que le presto algo para poder comprar algunas cosas.
ResponderEliminarTampoco hay que olvidar que el procedia del deporte bulgaro que antes de la caida del muro, gente como el, eran autenticos privilegiados, de ahi viene la prepotencia... si no hubiera sido bueno al futbol, a saber de que habria acabado.