Arsenio Pastor Erico Martínez nació en Asunción (Paraguay) en 1915.
De ascendencia italiana, desde muy chico demostró gran habilidad con la pelota y más de uno le vio potencial de futura estrella cuando jugaba en la cancha de un colegio salesiano. De allí saltaría a Nacional de Montevideo, junto a sus hermanos Enrique y Armando. Entre 1909 y 1942 varios familiares suyos -además de él- vistieron la casaca de esa institución. Debutó a los 15 años de edad en la primera división de la “Academia”, mostrando mucho talento desde el principio.
En 1932 sucedería un hecho político que cambiaría su vida para siempre: el inicio de la guerra entre Bolivia y Paraguay, la cual se prolongaría durante 3 años. Como Erico no tenía edad para ser enrolado, lo incluyeron en un combinado de la Cruz Roja guaraní que salió de gira por Sudámerica para recaudar fondos.
No tardó en deslumbrar a dirigentes de diversos clubes locales, que en 1934 pugnaron por conseguir sus servicios, siendo River e Independiente los que pelearon hasta el final por ello. Cuando todo hacía pensar que Erico firmaría con River, apareció inesperadamente por Avellaneda. ¿Qué pasó? Años después el propio delantero daría su versión: "En River estaba Bernabé Ferreyra como gran figura ¿qué podía ir a hacer yo allí?.
Los 2 primeros años fueron un tanto complicados para Erico, ya que varias lesiones no lo permitieron jugar en plenitud, además, Independiente no tenía un gran equipo en la parcela defensiva.
En 1937 empezó a destacar de verdad, ese año anotó 47 goles en 34 partidos y se convirtió en el jugador que más goles había marcado en un sólo año en toda la historia de la competición, dicho récord estuvo vigente hasta que en 1975 lo batió Héctor Scotta. Sin embargo sus registros no sirvieron para que su equipo alcanzase el campeonato de liga.
En las temporadas siguientes: 1938 y 1939, Indepentiente de Avellaneda consigue 2 títulos de Liga, desplegando un fútbol de alto corte ofensivo. El guaraní además logró ser el máximo artillero en ambos campeonatos, con 43 y 40 goles respectivamente.
Respecto al torneo de los 43 goles, hay una anécdota buenísima, existía una tabacalera que producía los cigarrillos “43” (llamados luego 43/70) que había establecido un premio para quien hiciera esa cantidad de goles pensando que nadie llegaría a la misma, faltando un par de fechas Erico ya la había alcanzado, tuvo que dejar pasar muchas ocasiones de gol para quedarse con el premio, sirviéndole esos tantos a sus compañeros.
Erico siguió haciendo goles en los años siguientes, pero su club no volvería a ser campeón, a comienzos de 1942 surgió un problema. Arsenio discutió con la nueva directiva del equipo por considerar que sus servicios no eran retribuídos justamente y se terminó yendo a su país natal. No obstante, Erico no fue vendido y posteriormente le hicieron un nuevo contrato, así que en 1943 estaba de nuevo con el equipo. Pasaron varios torneos sin que Independiente pudiera alcanzar el tíulo, él por supuesto seguía con su sangría de goles, hasta que en 1946, ya con grandes problemas en las rodillas decide fichar por Huracán, tan sólo jugó 7 partidos con su nuevo club, en 1947 abandona el fútbol argentino después de anotar 293 goles en el campeonato, lo que lo convierten, aún a día de hoy, en el mayor goleador de la historia del torneo.
En 1947, con 34 años ficha por su querido Nacional de Montevideo, donde es jugador y al mismo tiempo entrenador, el equipo finaliza en la 2ª plaza del campeonato, se retiraría en 1949.
Su gol más famoso fue anotado en 1934: "vino un centro desde el costado del área enviado por De la Mata y él se tiró en palomita pero se pasó… aunque antes de caer al piso, la enganchó con los tacos y la mandó a guardar, desatando el lógico delirio de sus hinchas". Con esa especie de “Escorpión”, desde esa tarde se ganó apodos tales como “El saltarín rojo” o “El hombre de mimbre”, para que os hagais una idea es más o menos lo que hizo René Higuta en su famosa parada con Colombia en un partido amistoso.
Para que os hagais una idea del nivel de juego de Arsenio Erico, debeis saber que Alfredo Di Stéfano, que era hincha de River Plate (el gran rival de Independiente por aquella época) dijo de Arsenio: “Es diferente a todos, a todo lo que vi. Un jugador notable, todo lo que engloban -sin exagerar- las cinco letras de la palabra crack. Para mí era como un malabarista de circo, un artista… perdón, un gran artista”. Inclusive, la “Saeta” lo considera mejor que el propio Pelé.
Curiosamente, jamás jugó en su selección. Resulta que cuando Paraguay jugó el Mundial del ´30 Erico apenas tenía 15 años, luego vino la citada guerra y ya siendo figura de Independiente nunca pudo ser convocado, debido a una reglamentación de la época que impedía a los paraguayos que militaban fuera de las fronteras jugar para su selección. Aunque cabe señalar que Arsenio pudo haber jugado un Mundial… para Argentina. Antes de la cita en Francia ´38 la directiva de la Federación Argentina pretendió nacionalizarlo y a cambio le ofreció $ 200.000, una verdadera fortuna para la época Pero sin titubeos, el delantero fue claro: “No, agradezco el honor pero antes que nada soy paraguayo”.
Luego de su retiro se afincó en nuestro Argentina, donde se casó en 1960. Vivía con lo justo, aunque dignamente, lejos de los lujos que ostentan los futbolistas de hoy. En sus últimos años le preguntaron acerca de cual era el jugador al que veía con similares características a las suyas; contestó que Mario Alberto Kempes.
Arsenio Erico murió en 1977, un día antes del deceso, le había sido amputada la pierna izquierda por una complicación arterial que derivó en gangrena. Da la casualidad de que al día siguiente de su muerte jugaban Independiente y River, la afición, durante partido, coreo en varias ocasiones: “Se siente / se siente / Erico está presente”. El entierro fue pagado por Independiente.
Es considerado por la FIFA como el mejor jugador paraguayo de todos los tiempos y uno de los mejores futbolistas sudamericanos de la historia.
Esta es la historia de uno de los jugadores más grandes que nos ha dado el fútbol, que sin embargo, es un gran desconocido en el fútbol europeo, menos mal que aún nos queda gente como Di Stéfano para recordarnos de vez en cuando a alguno de los grandes de este deporte.
Preguntas: ¿Conocías la historia de Arsenio Erico? ¿Os cambiaríais de nacionalidad por dinero?
Como siempre digo, espero os haya gustado y se agradecen (y mucho) los comentarios, si conoceis algún detalle más sobre la temática del artículo podeis comentarlo, os animo a participar en La Mazeta Deportiva, un saludo a todos.
P.D: Felicidades a todos los barcelonistas!
Gracias Juan por rescatar deportistas antiguos, Hermosa historia. Cambiar la nacionalidad por dinero?¿ Pues si.
ResponderEliminarNo conocía la vida de este jugador, realmente interesante. Si algo tienen los jugadores sudaméricanos es su patriotismo, y este se lleva la palma, 200.000 $ son incluso ahora una fortuna, en aquella época era una cantidad con la que te podías jubilar y vivir toda una vida rodeado de lujos.
ResponderEliminarSuelo seguir el blog, trasmite frescura y cuentas historias que siempre resultan agradables de leer. Un blog que suelo recomendar.
Un saludo, Juan, y felicidades por tu trabajo
No lo conocia para nada, pero es cierto que mucha gente siente de verdad los colores de su patria y no se cambia de nacionalidad por nada del mundo.
ResponderEliminarFelicidades por el aporte.
Jajaja yo al igual que Estrella mater me cambiaría la nacionalidad :p Hablando en serio, seguro que se sintió pleno como jugador y como patriota no?
ResponderEliminarGracias Juan
Lo que me parece injusto es que la FIFA solo destaque a jugadores como Maradona,Pelé, etc
ResponderEliminarCuando existió un futbolista tan extraordinario como ARSENIO ERICO muchas personas lo han describido de esta forma como el artista del fútbol y yo como Paraguayo creo que es una gran injusticia que no hayan reconocido a este jugador por lo menos como uno de los mejores de América
A parte de eso me ha encantado tu blog y me alegra saber que hay personas que colaboran para que se conozca mejor el fútbol y los grandes jugadores de la historia
La verdad que es muy triste,q un gran jugador no sea reconocido como se lo merecio y merece,y disculpame que te corrija,pero fue de nacional de asuncion paraguay no de montevideo,igual gracias por el blog,GRANDE POR SIEMPRE ARSENIO ERICO!
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